Pechina, Almería – Una vecina de la barriada del Chirichi, respaldada por una decena de residentes del municipio, ha alzado la voz a nivel nacional para denunciar los continuos robos y los tiroteos que están sembrando el pánico entre los vecinos de esta tranquila localidad.
Según declaraciones de la afectada, los episodios de delincuencia se han intensificado en los últimos meses, dejando a los habitantes de la zona en un estado de constante preocupación. “No podemos vivir tranquilos. Los robos son cada vez más frecuentes y los disparos se escuchan a cualquier hora. Vivir así es insostenible”, afirmó la denunciante.
Los vecinos, unidos por la desesperación, han decidido tomar medidas para visibilizar la situación que afecta directamente su calidad de vida. Han enviado peticiones a las autoridades locales y han hecho un llamamiento a los medios de comunicación nacionales para que se tomen medidas urgentes.
«Ya no se trata solo de lo material que nos roban, sino del miedo con el que vivimos. Tememos por nuestras familias y por nuestra seguridad», explicó otro vecino, que prefirió mantenerse en el anonimato, además ha afirmado que este problema se debe a la lucha entre bandas delincuenciales que están afincadas en Pechina y que según este vecino se dedican al trapicheo de sustancias psicoactivas.
La situación ha encendido las alarmas en Pechina, donde las fuerzas de seguridad locales aseguran estar trabajando para reforzar la vigilancia en la zona. Sin embargo, los residentes reclaman una mayor presencia policial y soluciones contundentes para acabar con estos episodios de inseguridad.
Por su parte, el Ayuntamiento de Pechina se ha realizado reuniónes con representantes vecinales y autoridades provinciales para abordar las preocupaciones y buscar medidas efectivas que devuelvan la tranquilidad a los afectados, pero aun no se ven los resultados
La denuncia pública pone de manifiesto una realidad que, según los vecinos, lleva tiempo afectándolos, y esperan que esta vez las autoridades actúen con celeridad para garantizar la seguridad en el Chirichi y sus alrededores.